
¿Usted seguirá comprando a través de plataformas digitales? ¿Regresará a las tiendas físicas? ¿Cómo estará su economía en 2021, priorizará sus gastos?
Son algunas de las interrogantes que muchas empresas investigadoras de mercados analizan y tratan de proyectar en sus próximos informes de tendencias a nivel global y local, tras el impacto del COVID-19en el 2020.
Deloitte, por ejemplo, señaló que el 57 % de los consumidores entrevistados en 19 países todavía tiene preocupaciones moderadas a altas sobre la salud. Estos son los más grandes entre los países más poblados del mundo, China, India y México, y los menos en los Países Bajos. Esto, de acuerdo con su último estudio de rastreo de consumidores del 2 de noviembre pasado.
En promedio, el 30 % de todos los encuestados en los países participantes expresó su preocupación por realizar los próximos pagos. Esto fue más obvio en México (54 %), Chile (53 %) e India (46 %). En India (63 %) y China (47 %) fueron los más propensos a retrasar las compras importantes. En comparación, los encuestados en los Países Bajos, Corea del Sur, Japón y Alemania se sintieron más seguros acerca de sus finanzas y salud.
En tanto, Oikonomics desarrolla un estudio de expectativas 2021 que será presentado dentro de unas semanas. Sin embargo, David Luna, consultor sénior de la firma, confirmó que la incertidumbre aún es alta, no solo a nivel global, sino también en Ecuador; y proyectó que es probable que las tendencias evidenciadas en los diferentes mercados y en el comportamiento del consumidor se mantengan para el 2021.
«En el caso particular del Ecuador, además de la incertidumbre relacionada con la pandemia, la incertidumbre es mayor a causa de elecciones que se celebrarán el próximo año», agregó el experto.
En lo relacionado con las expectativas de los consumidores, de acuerdo con información oficial de septiembre de 2020 y contrastándola con las expectativas de los consumidores del 2019, se puede apreciar que en términos generales se mantienen igual de pesimistas, analizó Luna.
Por ejemplo, el 25 % de personas encuestadas en septiembre pasado sobre la situación económica del hogar en los próximos tres meses respondió que será peor frente al 19 % del 2019.
«En este sentido, se espera que en el 2021 los consumidores ecuatorianos contraigan su consumo en productos y servicios no esenciales, manteniendo el comportamiento del ciclo económico. En definitiva, todavía es muy difícil afirmar que durante el 2021 superemos esta crisis», concluyó Luna, quien añadió que «el ecuatoriano se volverá más exigente en temas de calidad e higiene -está aprendiendo a la fuerza-, pero tendrá menos dinero para gastar» .
A pesar de ello, el canal online que en el 2020 fue uno de los ganadores durante la pandemia, tiene buenas expectativas para el 2021, según Leonardo Ottati, director general de la Cámara Ecuatoriana de Comercio Electrónico (CECE), quien aseguró que esperan un excelente desempeño tanto en facturación como en frecuencia de compras.
Se basa en el repunte que tuvo el segmento en el 2020 cuando creció el 800 % en visitas a los sitios web y ventas de alrededor de $ 2.300 millones, $ 700 millones más que el 2019. Para el 2021, el directivo proyecta un crecimiento no menor a un doble dígito.
«Existe mucha más gente pensando digitalmente, por muchas razones, en muchos casos por necesidad, por la buena experiencia; y en otros casos empezaron a verlo como una alternativa, ya es parte de la oferta de canales que tienen los comercios», analizó Ottati, quien resaltó que existen categorías de transacciones muy frecuentes como los artículos de supermercados, comidas para mascotas, farmacias y más.
Ottati añadió otro elemento que lo lleva a confiar en su proyección para el 2021: «La banca está sumamente enfocada en temas digitales, cada vez vemos que mucha más gente utiliza servicios bancarios y se atiende digitalmente y esto es fantástico para el mundo del e-commerce«.
Sin embargo, el impacto en los ingresos es otro aspecto importante para el consumidor. Así lo expone Jheovany Mejía, director ejecutivo de Eureknow, en una investigación de mercados realizada durante la pandemia.
El 57 % de los trabajadores con relación de dependencia y el 68 % de los trabajadores independientes piensa que será muy complicado salir de la crisis después de la pandemia. Mientras que solo el 5 % y el 7 %, respectivamente, piensa que no será nada complicado.
En tanto, el 41 % de los trabajadores independientes encuestados piensa que sus ingresos bajarán entre el 75 % y el 100 % (se quedarán sin ingresos) después de la crisis, versus el 11 % de los trabajadores en relación de dependencia que piensan lo mismo, sin embargo, el 47 % de este segmento si piensa que bajarán por lo menos el 25 %.
Estas proyecciones se pueden palpar en las tendencias para la festividad más próxima, Navidad, donde se prevé un consumidor con un menor presupuesto que en años anteriores.
Según otro estudio de Eureknow, para este 2020 la tendencia del presupuesto promedio será de $ 211, en comparación con los $ 275 del 2019 y más aún con los $ 330 y $ 445 del 2018 y 2017, respectivamente.